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13.11.11

III. Superhéroes motorizados / WLA “Liberator”: la Harley del Capitán América


(> continuación) Los superhéroes están de moda. Durante las últimas tres décadas el séptimo arte se ha hecho eco de las hazañas de algunos de los personajes de cómic más famosos de la historia... la taquilla manda, claro. Desde aquel Superman (1978) o Conan el Bárbaro (1982) han llovido unas cuentas producciones. Durante mi infancia fui un compulsivo comprador de algunos de estos cómics que, hace 5 años vendí, y reinvertí en sendas colecciones.
La ropa también se ha subido al carro, con camisetas “heroicas” disponibles no sólo en tiendas de comics sino también en otras tan populares como Springfield o Primark.

El caso es que de todos los superhéroes creados en el último siglo, muy pocos han usado las motos como arma o para desplazarse. Uno de mis favoritos, el Motorista Fantasma, no se bajaba de ella, mientras que Robin (el compañero de Batman) y el Capitán América se han dejado ver en una de cuando en cuando.

Respecto a este último, Harley-Davidson ha recreado la WLA “Liberator” de 1942 para la película de Marvel Studios “Capitán América: El Primer Vengador”, una moto semejante a la que el ejército americano usó en la II Guerra Mundial. El apodo “Liberadora” fue acuñado por los propios soldados durante la contienda. La moto equipaba un bicilíndrico Flathead (2ª generación, ahora vamos por la 7ª) de 750 cc para rivalizar con la BMW R71 de los alemanes. Se fabricaron unas 70.000 unidades entre 1941-1945 y hubo 7 evoluciones.

En la película, en lugar de usar un modelo original, han “tuneado” una Cross Bones actual dotándola de casi todos los gadgets montados en aquella moto: funda para la escopeta, alforjas de cuero, cajas de municiones, altavoz, etc. Además han añadido unas vistosas metralletas sobre el guardabarros delantero y han quitado el parabrisas original.

La centenaria firma americana ha construido 5 unidades de esta WLA 2011: tres de ellas para trucos y efectos especiales y dos para una escena en la que el Capitán América levanta una moto por encima de su cabeza. Dos de ellas formarán parte de la colección permanente del Museo oficial Harley en Millwaukee.

Ambientada en la II Guerra Mundial desde el punto de vista más yankeeneano, su protagonista defiende símbolos como la libertad, la justicia y la igualdad a lomos de una motocicleta para enfrentarse a sus archienemigos nazis encabezados por Cráneo Rojo (un agente nazi supervillanizado de Hitler).

Cabe recordar que el personaje de cómic de Steve Rogers (Capitán América) nació en 1941 de las manos de Joe Simon y Jack Kirby como otra herramienta propagandística del conflicto. Steve era un mierdecilla que no daba el físico para alistarse en el ejército y que usaron de cobaya para experimentar el Suero del Supersoldado, un líquido que le convirtió en una máquina de matar malos.

Tras la guerra, el personaje cayó en decadencia y fue revitalizado por el genial Stan Lee en 1964 dentro de la saga Los Vengadores. Desde entonces, el Capitán América a minimizado su nacionalismo, convirtiéndose en un paradigma de los valores humanos por encima de gobiernos e ideologías políticas Ahora es el exponente del perfecto superhéroe anteponiendo la seguridad del ciudadano antes que la suya propia.

17.7.11

III. 10 Pilotos 10: Doug Chandler


Dos décadas de carrera deportiva dan para mucho. Chandler ganó 3 nacionales AMA con Kawasaki, venció mangas del mundial SBK y disputó varias temporadas con las 500 de GP… entre otras cosas. Excepto las motos de agua… creo que no se le escapó nada.

John Douglas Chandler ha sido uno de los pilotos más versátiles de la historia de las dos ruedas. Comenzó corriendo motocross y ganando carreras en dirt-track (rookie del año en 1983). Se coronó en las superbikes, probó en Europa con las 500 de 2 tiempos, cató supersport y se retiró en supermotard (ganó su carrera de debut en Virginia 2003).
Ha corrido para ocho marcas diferentes (Honda, Kawasaki, Yamaha, Suzuki, Cagiva, Harley, Ducati y KTM) obteniendo victorias con casi todas ellas, dejando claro su polivalencia como corredor. No en vano, es uno de los cuatro pilotos americanos que ha ganado carreras en categorías diferentes.

En 1988 comenzó su carrera deportiva en asfalto, en la categoría de bicilíndricas. Su idilio con Kawasaki comenzó en 1990, cuando ganó el campeonato AMA SBK con la ZXR 750 RR del Team Muzzy. También se llevó dos mangas del mundial SBK: una en la cita americana de Brainerd y otra en la japonesa de Sugo.

Después, se fue a Europa y probó cuatro temporadas en 500 con Yamaha (9º), Suzuki (5º) y Cagiva (10º/9º) para volver a territorio americano en 1995. Probó con la poco competitiva Harley VR1000 y en 1996 volvió a fichar por Kawasaki, la marca con la que se le identifica desde entonces (corrió con ella hasta 2001). Tanto en 1996 como en 1997 arrasó en los Estates, mostrándose intratable con la ZX-7R de Muzzy.

El título de 1998 se le escapó debido a un accidente en Laguna Seca, siendo subcampeón de SBK y de Supersport. A finales de 1999 terminó su relación con Muzzy para firmar con Ducati.
Desde 2007, dirige su propia escuela de conducción con Honda: Doug Chandler Performance Motorcycle School.


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28.3.11

Harley-Davidson FLSTN Softail Deluxe: vuelve la vieja escuela

























Partiendo de la base de que cualquier Harley-Davidson evoca una imagen clásica, los nostálgicos y amantes de todo lo retro se encontrarán más a gusto sobre la Deluxe. Para gustos los colores, pero la gama actual de Milwaukee se ha modernizado demasiado olvidando el “sabor” de los modelos que la han hecho mítica. Por ello, los detalles que rodean a esta Softail hace que se salve de la quema convirtiéndose en una de las más faliosas. Un verdadero lujo “Old School” para los sentidos.

La familia Softail 2011 tiene una de las mejores integrantes por su corte clásica e impecable factura. Nada más verla, un flash-back en forma del mítico modelo “Nostalgia” de principios de los ’90 invadió mi cerebro. Aquella máquina me entusiasmó, igual que lo ha hecho ahora la nueva Deluxe. Aún sin ser iguales, las señas de identidad se comparten: amortiguadores ocultos, llantas de radios, banda blanca en los neumáticos, guardabarros envolventes con borde cromado, ausencia de parabrisas… Hasta la cuidada pintura opcional bicolor en blanco/negro con fileteado rojo tiene cierta “inspiración nostálgica”. ¿Y qué decir de las ópticas? Los intermitentes “bullet”, la pareja de antinieblas delanteros y el piloto trasero “tombstone” dan un toque retro difícil de igualar.

Sólo con subirte y agarrar el ancho manillar ya te sientes el rey del mundo, pero no todo se queda ahí. Técnicamente hay mucha evolución: inyección electrónica ESPFI, sistema de gestión de temperatura del motor a ralentí EITMS (el cilindro trasero no funciona a ralentí para que no suba tanto calor a sus ocupantes), seguridad Smart (mando a distancia con el que puedes encender la moto sin llave y conectar/desconectar la alarma), ABS de serie (ocultando la fealdad del cableado en el propio buje de la rueda), etc…

TWIN CAM 96B: DE LUXO

Aunque la sexta generación de mecánicas Harley (Twin Cam) lleva entre nosotros desde 1999, no fue hasta 2007 cuando se introdujo la variante de 96 pulgadas cúbicas (de ahí su numeración), equivalente a nuestros 1.570 cc. La suavidad de funcionamiento de este motor es increíble, incluyendo lo que para muchos puristas puede ser una ofensa: ¡las vibraciones han desaparecido! Trabajando sobre el preciso cambio de seis velocidades gracias a la doble palanca “punta-tacón” notarás las interminables posibilidades de este big twin. No hace falta superar las 3.000 rpm pues no hay ninguna montura que te permita “harlear” a 120 km/h como las unidades de Milwaukee. Cuando engranas la última marcha, un 6 luminoso verde junto a la aguja del velocímetro te avisará de que empieza el disfrute ilimitado y termina la civilización decadente: Oh yeah baby!

CICLO Y OTRAS COSILLAS

Aunque todas las Softail ocultan los amortiguadores bajo el motor para ofrecer esa imagen auténtica de rigidez cincuentera, la Deluxe peca de una respuesta algo seca en su suspensión trasera (oculta los amortiguadores como en toda la familia Softail), algo que contrasta con el esponjoso tacto de la horquilla delantera. La Deluxe necesita de un firme liso y bien asfaltado para sacar lo mejor de sí misma. Las brusquedades no son amigas de un vehículo de más de 2 metros de largo y 330 kg declarados en orden de marcha por lo que deberás anticipar y trazar las curvas a la primera. De lo contrario, los sustos producidos por las inercias que conlleva el mastodóntico volumen de esta escultura rodante serán imposibles de corregir.

Los frenos cumplen, aunque las custom siempre agradecerán que tires primero de freno trasero para completar la jugada con la maneta derecha. Las cosas serán más fáciles.

El pequeño display digital insertado bajo el velocímetro presidencial del depósito ofrece toda la información necesaria para que “no te falte de ná”. Actuando sobre el pulsador Trip de la piña izquierda tendrás: cuentakilómetros total, doble parcial, marcha engranada/revoluciones, autonomía estimada y reloj.

Los 18,9 l. de su depósito te permitirán recorrer unos 300 km sin mayores problemas, gracias también a lo ajustada de su inyección. Olvídate de afrontar muchos kilómetros con pasajero con el asiento de serie, pues es duro y excesivamente pequeño. La Deluxe es un modelo muy individualista por lo que, si sueles rodar a dúo, deberás montar otra variante más acolchada dentro del catálogo de accesorios o pensar en otro modelo Harley.

Dependiendo de las opciones de color, el precio de la Deluxe oscilará entre 21.500 y 23.100 €.

14.3.11

Las mejores bicilíndricas BoTT (2ª parte)











(> continuación) Hubo cientos de creaciones peculiares, muchas pajas mentales increíbles y verdaderas obras de arte... pero las más importantes fueron estas:

Ducati 900 SS
Jimmy Adamo pilotó las Ducati preparadas por Reno Leoni durante toda la década de los ‘80. Las primeras 900 SS no tenían rival y con ellas logró los títulos nacionales de 1981, 82 y 83. Aquella SS cubicaba 950 cc, pesaba 145 kg y rendía 110 CV a 8.500 rpm con carburadores Malossi de 41,5 mm. Llegaba a los 251 km/h en el peralte de Daytona.

BMW R90 Daytona
John Long
y su BMW del importador San Jose ganaron alguna categoría inferior, mientras que Dave Emde logró incluso batir a alguna Ducati a pesar de la inferioridad mecánica de la moto alemana: 95 CV a 8.500 rpm, cardan y 156 kg. Su suspensión delantera antihundimiento llamó mucho la atención. ¿Te suena el Telelever?

H-D “Martillo de Lucifer”
Jay Springsteen y Gene Church (campeón en 1984, 85 y 86) dominaron con mano de hierro las BoTT durante tres años frente a las máquinas italianas, paseando con orgullo la bandera Yankee en su tierra. Esta bestia era un popurrí de componentes desarrollados en dirt-track: chasis, motor de carrera larga XR 750 con distribución por varillas, 106 CV a 7.500 rpm, etc. El pique con Ducati fue salvaje.
La evolución posterior contó con un chasis tubular artesanal, monoamortiguador trasero y motor de XR 1000.

Laverda 500 Montjuic
La Laverda de Maurice Ogier fue la bicilíndrica de menor cilindrada en ganar una carrera de BoTT gracias a su ligereza (132 kg) y eficaz aerodinámica. El motor cubicaba 579 cc, proporcionaba 74 CV a 9.800 rpm, equipaba carburatas Dell’Orto de 38 mm y depósito de combustible bajo el asiento. Alan Cathcart ganó con ella en Daytona ’84.

Ducati 851
La victoria en Daytona ’87 con el excampeón del mundo de 500 Marco Lucchinelli significó un punto de inflexión en esta categoría y en la historia de Ducati. Fue la primera Duke en equipar un motor de 8 válvulas e inyección, rendía 120 CV a 11.000 rpm y llegaba a 265 km/h. Desde entonces, todas las superbikes de la marca han seguido esa configuración.

Guzzi Le Mans 1000
Campeona nacional en 1987, la super-Guzzi de John Wittner (más conocido como Dr. John -era dentista-) pilotada por Doug Braunecken adelantó lo que la marca italiana vendería en las tiendas pocos años después: las primeras culatas de 4 válvulas y correa dentada. La Guzzi cubicaba 999 cc, llegaba a 115 CV a 9.300 rpm y alcanzaba los 267 km/h.

Honda RS750 Commonwealth
Fue la única moto japonesa en ganar el campeonato. Lo consiguió en 1989 con Randy Renfrow a los mandos: motor RS 750 de dirt-track con 8 válvulas (base Transalp), carburadores Mikuni Flatside de 41 mm, suspensiones de 500 GP, culatas artesanales específicas, 857 cc, 100 CV a 9.400 rpm y 155 kg.

Quantel-Cosworth
Este artilugio británico fue desarrollado por Bob Graves sobre la base del bicilíndrico paralelo creado originalmente por la firma de motores de Fórmula 1 para el proyecto Norton Challenge de finales de los ’70. Roger Marshall venció con ella en Daytona ’88: 823 cc, 120 CV a 10.000 rpm, inyección electrónica, agua, 8 válvulas, motor autoportante... Lo malo es que pesaba 173 kg, pero en el peralte volaba a 280 km/h.

BMW R100 Fujii
El auge Twin en Japón hizo que el equipo de Yoshimori Fujii (un vendedor de coches BMW) viajara a Daytona. Sobre un motor de R100 desarrollaron una máquina de 98 CV a 8.300 rpm , con carburadores Keihin de 39 mm, dos válvulas por cilindro, chasis Beater, basculante de aluminio y Paralever. Con sus 160 kg alcanzaba los 250 km/h.

Britten V-1000
Mi favorita. Una de las mejores motos de carreras de la historia se adelantó 20 años a su época. La última evolución del genio neocelandés John Britten ganó en Daytona ’94 con Andrew Stroud machacando a las Ducati 926 oficiales de Ferracci: motor autoportante (no hay chasis) en V a 60º, inyección electrónica, suspensión delantera por paralelogramo, radiador bajo el asiento, 138 kg, 170 CV a 9.700 rpm, 303 km/h...

28.12.08

Bultaco + S&S: 50 años les contemplan










Dos insignes marcas, una española y otra americana, nacieron en 1958. La primera desapareció, mientras que la segunda funciona a pleno rendimiento. Un breve recuerdo es necesario y merecido para ambas.

La que para mí ha sido la mejor marca española de motos que ha habido no puede permanecer en el olvido. El 17 de mayo de 1958, un grupo de técnicos, comerciales y pilotos de Montesa se reunieron con Francisco X. Bultó en Can Castellví (Barcelona) para emprender un fantástico proyecto: la creación de una nueva fábrica de motos. Así nació BULTACO, la marca del dedo rampante, que a principios de 1959 sacaba al mercado su primer modelo, la Tralla 101.

A lo largo de su existencia fabricó casi 250 modelos distintos de todas las especialidades y llegó a producir aproximadamente unas 330.000 unidades, exportando a Francia, Italia, Inglaterra, EE.UU, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Austria, Suiza, Irlanda, Grecia, Canadá, Argentina o Japón, entre otros.
Actualmente Bultaco es una leyenda. A pesar de su corta trayectoria (1958-1982), sigue viva en el corazón de muchos, como en sus mejores momentos.
En competición, además de innumerables Nacionales en todas las especialidades, también se permitió el lujo de ganar 9 Mundiales:
- 50 cc: Ángel Nieto (1976, 1977), Ricardo Tormo (1978, 1981)
- Trial: Martin Lampkin (1975), Yrjö Vesterinen (1976, 1977, 1978), Bernie Schreiber (1979). También, 4 europeos entre 1968 y 1974.

George Smith y su esposa Marjorie fundaron la empresa S&S CYCLES PERFORMANCE en 1958. Desde entonces, la máxima de George ha permanecido inalterada: “I want to make all bikes go faster”. Especialista en potenciación y optimización de motores Harley-Davidson (actualmente, también de Victory), la alta calidad y funcionamiento de sus productos le han valido para reafirmarse como uno de los más prestigiosos nombres dentro del mundo custom V-twin. ¿Alguien no ha probado alguna vez los cilindros, filtros, pistones, bielas, cigüeñales, carburadores y demás juguetes de S&S?

Para celebrar este cumpleaños como es debido, S&S ha llegado a un acuerdo con el mítico Ace Café de Londres (que acaba de cumplir 70 años) para fabricar el motor de las 100 unidades de la Little Miss Dynamite, una Café-Racer del siglo XXI. Del resto se encargan Stonebridge Motor Co., Harris Performance y NGCC (Nick Gale Custom Cycles). Hablamos de una mecánica Sportster subida a 1.650 cc que entrega 135 CV a la rueda, 142 Nm a 5.000 vueltas y alcanza + de 200 km/h... ¡EN 5ª! Cambio Baker de 6 velocidades, embrague en seco anodizado en rojo con accionamiento hidráulico, filtro de aire especial modificado, etc.